El Boom latinoamericano fue
un fenómeno editorial que surgio entre los
años 1960 y 1970, cuando el trabajo de un grupo de
novelistas latinoamericanos relativamente joven fue
ampliamente distribuido en Europa y en todo el mundo. El boom está más relacionado con
los autores Gabriel García
Márquez de Colombia, Julio
Cortázar de Argentina, Carlos
Fuentes de México y Mario Vargas Llosa de Perú.
Por el movimiento de América Latina de la Vanguardia, estos escritores
desafiaron las convenciones establecidas de la literatura latinoamericana. Su
trabajo es experimental y, debido al clima político de la América Latina de la
década de 1960, también muy política. El crítico Gerald Martin escribe:
«No es una exageración para afirmar que si el continente del Sur fue conocido
por dos cosas por encima de todos los demás en la década de 1960, éstas fueron,
en primer lugar, la Revolución Cubana y su impacto tanto en América Latina y el
Tercer Mundo en general, y en segundo lugar, el auge de la literatura
latinoamericana, cuyo ascenso y caída coincidió con el auge y caída de las percepciones
Liberales de Cuba entre 1959 y 1971.
Representantes del boom
latinoamericano
§ Colombia: Gabriel García Márquez
§ Perú: Mario Vargas Llosa
§ Argentina: Julio Cortázar
§ mexico:
Carlos Fuentes, Juan Rulfo
§ Paraguay: Augusto Roa Bastos
§ Cuba: José Lezama Lima
§ Brasil: Jorge Amado
Antecedentes históricos
Las décadas de 1960 y 1970 fueron
décadas de agitación política en toda América Latina, en un
clima político y diplomático fuertemente influenciado por la dinámica de
la Guerra Fría. Este clima sirvió de base para los trabajos de los
escritores del boom latinoamericano,
y definió el contexto en el que sus ideas, a veces radicales, tenían que
funcionar. La Revolución Cubana en 1959 y los intentos frustrados de Estados
Unidos de atravesar la Bahía de Cochinos puede considerarse como
el inicio de este período. La vulnerabilidad de Cuba llevó a estrechar
lazos con la URSS, dando lugar a la crisis de los misiles en Cuba de
1962, cuando los estadounidenses y los soviéticos se acercaban peligrosamente a
la Guerra nuclear. A lo largo de los años 1960 y
1970, regímenes militares autoritarios gobernaron Argentina, Brasil, Chile,
Paraguay, Perú y muchos otros países. Por ejemplo, el 11 de septiembre de 1973,
el Presidente democráticamente electo Salvador Allende en Chile fue
derrocado y reemplazado por el general Augusto Pinochet.
En el período comprendido entre
1950 y 1975 pero en las zonas de por allá se produjeron cambios importantes en
la forma en que la historia y la literatura se plantean en términos de interpretación y escritura. También
se produjo un cambio en la auto percepción del español por novelistas
estadounidenses. El desarrollo de las ciudades, la mayoría de edad de una clase
media grande, la Revolución Cubana, la Alianza para el Progreso, un
aumento en la comunicación entre los países de América Latina y una mayor atención
a América del norte de los Estados Unidos y Europa contribuyeron a
este cambio. Los acontecimientos políticos más importantes de la época
eran los golpes de Estado en Cuba en 1959 y en Chile en 1973, la caída del
general Perón en Argentina, la lucha violenta y prolongada de la
guerrilla urbana, brutalmente reprimidas en Argentina y Uruguay, y la violencia
sin fin en Colombia.
Orígenes
Aunque la mayoría de los críticos
coinciden en que el Boom comenzó en algún momento del 1960, hay cierto
desacuerdo en cuanto a cual obra debe ser considerada la primera novela del
Boom. Para algunos sería Rayuela, de Julio Cortázar(1963),
mientras que otros prefieren La ciudad y los perros de Vargas
Llosa, que ganó el Premio Biblioteca Breve en 1962. Fernando Alegría considera Hijo
de hombre de Augusto Roa Bastos(que fue publicada en 1959) como
la obra inaugural del Boom, aunque, como señala Shaw se podría aún
remontarse a 1949 con Hombres de maíz de Miguel Ángel
Asturias.
Características
Las novelas del boom son esencialmente modernistas.
Tratan al tiempo de una manera no lineal, suelen utilizar más de una
perspectiva o la voz narrativa y cuentan con un gran número de neologismos (la
acuñación de nuevas palabras o frases), juegos de palabras e incluso
blasfemias. Como escribe el escritor Pope, en referencia al estilo de la Pluma.
Realismo Mágico
En los
extremos de la literatura afirma que el realismo mágico, un modo estético clave
dentro de la ficción reciente de América Latina... se materializa cuando la
historia de América Latina se revela como incapaz de explicar su propio origen,
una incapacidad que tradicionalmente representa... una demanda de un mito: los
mitos como un medio para explicar los principios que escapan a la narración de
la historia.
La ficción histórica
Un
interés por la historia es otra característica de las novelas del período de
auge. El paradigma de ello es la Novela del dictador, donde las
figuras y acontecimientos históricos fueron retratados de manera que las
conexiones entre ellas y los acontecimientos contemporáneos en América Latina
no podía ponerse en duda.